SOBRE LA APLICACIÓN PRÁCTICA DEL PENSAMIENTO POSITIVO

SOBRE LA APLICACIÓN PRÁCTICA DEL PENSAMIENTO POSITIVO

Cuando se habla de pensamiento positivo es común escuchar frases como «yo no puedo cambiar mi forma de pensar porque ya son muchos años» o cualquier «auto-entierro» por el estilo.

Tenemos muchos anclajes negativos, en mi opinión, en general; si alguien acude a un adivino y este le dice que tendrá un accidente, seguramente le creería más que si le dice que  le pasará algo maravilloso. Pero este hecho… ¿a qué ley responde?  ¡A ninguna!  A menos que inventemos la ley del negativismo.

Supongamos que nacemos en un equilibrio entre el pensamiento positivo y el negativo, ese sería el punto medio, neutro  y “cuesta” lo mismo variar los pensamientos hacia un extremo que hacia el otro, no debería haber una tendencia (natural) hacia ninguno de los dos extremos de pensamiento. Sin embargo en la sociedad general parece que sí está la tendencia hacia el negativismo,  tendencia que para mi refleja muy bien la frasecita de “No soy negativo, soy realista”

Si nos vemos en estos ejemplos,  ¿Cómo vamos a poder aplicar el pensamiento positivo en nuestras vidas? ¿Qué podemos hacer  para no seguir desplazándonos hacia la negatividad?

Primero no conformarse. Lo contrario del  positivo es el negativo, si pasamos de trabajar el pensamiento positivo, no nos quedaremos en pensamiento neutro sino en negativo, de modo que, aparte de no aprovecharnos de sus ventajas nos veremos afectados por las desventajas del pensamiento negativo.

Una vez conscientes de esto, todo será mucho más fácil. El siguiente paso es cambiar el dialogo interno, es un ejercicio de auto descubrimiento cuando se realiza por primera vez. Puedes darte cuenta de que hay toda una radio en tu cabeza y que no para de cotorrear todo en un tono quizás criticón o despectivo o del modo como suene tu auto diálogo. Es muy difícil trabajar en algo mientras te dicen: esto seguro que no se hace así, va a quedar mal, es que esto no es lo mío… bla, bla, bla y a todas horas en todo lo que haces bla.

Empieza por elegir tú la radio que quieres escuchar en tu cabeza. Al principio te parecerá una radio de mentira, falsa, irreal, pero te recuerdo que la radio que escuchábamos antes no es la verdadera, no es radio neutra, sino radio negativa.

Una vez que salves  ese estadio de sensación de mentira, ya te sentirás mejor. A partir de ese momento afina el auto dialogo para que sea aún más positivo. Trata de mantenerte en esta línea de pensamiento en los peores momentos y veras enseguida que eso fue lo mejor que podías hacer.  A partir de aquí notarás la mejoría en absolutamente todos los vectores de tu vida.

Si estás en este momento tan negativo/a que no te atreves siquiera a intentarlo por la certeza de fracasar, prueba a hacerlo solo en una ocasión, decide por ejemplo  ser positivo/a, activamente positivo/a en una reunión por ejemplo. Solo una cosa más; estamos acostumbrados a la antigua radio, estate atento/a , no es lo mismo “ no estar negativo”   que   “ estar positivo”.                                                                                              

Fernando Centeno.

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